jueves, 18 de junio de 2020

La Estatua de la Libertad


En las mismas ciudades en las que, por fin, caen las estatuas de aquellos esculpidos en la pétrea colonialidad “blanca”, machista, sexista, esclavista e imperial, se elevan los árboles de los que cuelgan los cuerpos de hombres “negros” inferiorizados, animalizados, discriminados y racializados. Frente a unos y otros, las fotografías y videos registran multitudes furiosas que expresan no sólo los valores de la época sino causas, diametralmente diferentes. 

Todo ícono porta en sí mismo un conjunto de características que responden a una determinada narrativa en la cual se lo inscribe y se le asigna sentidos que construyen y refuerzan visualmente la manera como son imaginados y representados los sujetos, sus relaciones y prácticas, distribuyendo lugares fijos en la construcción simbólica del poder y del depoderamiento, tal como he propuesto que se llame a las imagoloquías. 

De manera específica, durante el despliegue del capitalismo, en plena expansión imperial europea, se consolidaron imagoloquías del poder que privilegian la distinción, el donaire, lo bello, la hidalguía, y la racionalidad explícitamente asignadas a ciertos individuos cuya escenificación y significación se eleva sobre pedestales en los que se concede a la blanquitud prerrogativas virtuosas de tamaño singular, confiando su perdurabilidad a los materiales más preciados y firmes. 

Durante cinco siglos también se encumbraron los cuerpos cazados, violentados y mancillados de miles que murieron ahorcados e incinerados para ser convertidos en el ejemplo de lo que el odio, la ignorancia y la crueldad extrema sitúa en el trato desconsiderado y desigualitario con el que se erigió al negro como objeto del dominio, la desposesión, la negación de derechos, la fijación de la maldad y la configuración de la perversidad y la barbaridad reflejadas en una tez tan inexistente como la blancura misma; transfiriendo a la piel la máscara bifronte del racismo y la identidad mistificada del ellos y el nosotros homogéneo, sin fractura alguna. 

Ya sea sobre pedestales o sobre árboles, lo único que se eleva es una negación. Como Fanon afirma, “para nosotros el que adora a los negros esta tan «enfermo» como el que los abomina”. Por ello, la invención de un objeto icónico, cuya verdadera entidad ha sido arrancada de las páginas de la historia y artificiosamente adobada al gusto civilizatorio de occidente, reclama el levantamiento de un sujeto consciente de sí, en abierta recuperación de su herencia negada, trasplantada y enterrada bajo las raíces de los árboles que crecieron a la sombra mentirosa de la inferioridad, sobre los que cuelgan los cuerpos a los que se niega y quieren seguir negando toda luz, todo honor, toda belleza, toda compasión. 

Si el Orfeo de Sartre, negro, pierde la mordaza no es para entonar alabanzas en las lenguas de quienes le sometieron y cancelaron su propia voz: La dialéctica del denegrecimiento reclama un grito audible por todas las latitudes en las que las hijas e hijos de África desoyen los cantos de sirena que llaman a la resignación. La quietud se torna en movimiento. El silencio se vuelve acción. La pasividad muta como acto creativo, retando la herencia icónica y los lugares fijos, trastocando las fronteras de la historia, rompiendo los moldes de la negación y diluyendo el dolor esencialista tras las tesis del racismo. 

Más allá de la emoción y la espuma, emerge la potencialidad de consolidación de un momento dialéctico y esperanzador cuya explosión rompa definitivamente los valores y las representaciones imposibilitantes erigidas tras la invención del negro; restituyendo y afirmando la dignidad negada hasta encumbrarla como una estatua firme y vigorosa que canta “libre, al fin; libre, al fin. ¡Somos libres, al fin!” 

Referencias 

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Lorde, A. (2003) La Hermana, la extranjera. Fanon, F. (2011) Piel Negra, máscaras blancas. “La experiencia vivida del negro”. Sartre, J.P. (1960) Orfeo Negro. Arcos R., A. (2018) Imagoloquía: ¿qué lugar ocupa la imagen en la producción de discurso político? Luther K., Martin. (2016) The Radical King Legacy.

#LaNotaDelJueves

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CuestionP Aportes para una teorìa polìtica de la afrodescendencia por Arleison Arcos Rivas se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-SinDerivadas 2.5 Colombia.

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